El Kefir, con su tremenda capacidad de elaboración y desarrollo de la flora intestinal es, decididamente, un gran potenciador de ambos.
Se notan sus efectos mentales y físicos desde los primeros días de su consumo.
La leche no conviene consumirla sin haberse convertido en kefir. Además, es una buena manera de desinfectarla. También exelente para conservarla.
La leche industrializada tiene destrozadas sus estructuras naturales. El Kefir las reconstituye, bastante.
Las investigaciones científicas de laboratorio sugieren que la actividad del kefir contra las bacterias perjudiciales en el interior del estómago de los seres humanos, se deben no sólo a una producción de un PH desfavorable a éstas, sino que también, eventualmente, debido a ciertas sustancias segregadas por las colonias del kefir durante su fermentación.
Los resultados en laboratorio contra 8 diferentes patógenos, como el E. Coli, Staphylococcus aureus, la salmonella u otros, se obtuvieron después de un mínimo de 36 horas de fermentación.
El calcio de la leche impide la absorción de la mayor parte de la grasa de la leche entera. La mayor parte de ésta es evacuada a través de los intestinos.
La leche entera contiene aproximadamente tres por ciento grasa, la leche "desgrasada" puede contener uno y medio por ciento. Lo cual, con tan mínima diferencia es imposible que nadie vaya a adelgazar por eso.
A los bichitos les gusta sólo la leche entera. Mejor sin pasteurizar. Si viven cerca de alguna granja y pueden comprar sin pasteurizar y sin ningún tratamiento industrializado, mejor todavía.
La grasa de la leche es tremendamente alimenticia. No es como la grasa de la carne que sí es nociva para la salud. Por lo tanto es una verdadera pena no ingerirla.
A los bichitos, técnicamente hablando, se los llama: "Nódulos"
Con leche pasteurizada los bichitos crecen, aproximadamente un 25% semanal. Pero con leche cruda, directa de la vaca y sin pasteurizar se llenan de felicidad. En un clima fresco y adecuado lo demuestran claramente, alborozados, con un crecimiento/aumento de un 50% diario.
Pensar en regalar a amigos o vecinos. Una pena tener que tirarlos después de haberse portado tan bien con nosotros.
Temperatura
Mínima: 16 grados. Máxima: A 32 grados los bichitos comienzan a morir. A más de 25 grados su calidad se reduce.
En verano su reproducción se lentifica y su sabor se acidifica. Pierde espesor y queda más aguado. Para que esto no suceda hay que introducirlo en la nevera (Heladera - Refrigerador) varias veces al día, para una refrescada. Una hora por vez. Unas tres veces diarias.
Esto quiere decir que si estamos en verano habrá que ponerlos en la nevera, lo más abajo posible, y la regulación de la temperatura a una graduación lo más alta posible. Claro, con cuidado de no arruinar otros alimentos que allí se conserven.
Precauciones
La heladera (nevera) Puede llegar a tener grandes diferencias de temperatura entre el estante de arriba y el estante de abajo.
Por ejemplo, estas podrían ser temperaturas standard:
En
el congelador: 20 grados bajo cero
En el estante de arriba: 10 grados sobre cero
En el del medio: 5 grados sobre cero
En el de abajo: 7 grados sobre cero
En el cajón debajo del estante de abajo: 10 grados sobre cero
De todas maneras la temperatura en el cajón de abajo es demasiado fría y los bichitos se nos mueren de frío y se lentifica su proceso. En el verano hay que poner un termómetro en el cajón debajo del estante de abajo para saber con exactitud cual es la temperatura. En caso de, por ejemplo es 15 grados, va a haber que practicar cuánto tiempo se lo deja adentro, y cuánto afuera. Como para equilibrar. Es demasiado frío para dejarlos allí 24 horas. Se puede experimentar.
Aquí escrito suena complicado. Pero todo se hace con la práctica.
Conservación
Para conservarlos para cuando no estamos en casa durante vacaciones los ponemos en la nevera (Heladera) en el estante de arriba. Esto es el estante debajo del congelador.
Para cuando volvamos se encontrarán con vida pero débiles. Llevará unos días hasta que se recuperen. Habrá que cambiarles la leche todos los días y ya mejorará apariencia y sabor. En unos 15 días de estarle cambiando la leche a diario.
Para mejorarlos en sabor y calidad conviene revolverlos suavemente unas tres veces diarias.
En lugar de revolverlos sólo se podría agitarlos en círculo un poco para que el contenido se mezcle.
En caso de hacer calor, una temperatura ambiental de más de unos 25 grados, también conviene ponerlos en la nevera (refrigerador-heladera) 3 veces diarias, por el término de una hora cada vez. Al sacarlo de la nevera la temperatura interior del kefir, sería entre 15 y 20 grados. Pero si se lo dejara dos horas la temperatura podría bajar hasta los 10 grados. Lo cual no es lo recomendable.
Por cuanto esto no es más que orientativo, hay que practicar para cogerle la mano y poder arribar a conclusiones propias.
Como conservar leche cruda: Se deben tomar precauciones, en particular después de su ordeño. Especialmente si estamos interesados en ingerir leche en su estado natural, sin pasteurizar.Se sugiere que en caso de usar leche cruda directo de la vaca, y sin pasteurizar, se debe congelar la leche mínimo 24 horas antes de usarla.
Asimismo se debe colar con un colador de tela antes de ponerla en el congelador.
Para agregar más seguridad antibacteriana se puede hervir tres veces, con intervalos suficientes para su total enfriamiento, antes de ponerla a congelar. Aunque algunas fuentes se oponen a este procedimiento por cuanto se argumenta que se pierden algunas propiedadesLa leche se daña rápidamente después de su ordeño. Lo mejor es ir y ver como el granjero ordeña la vaca, para poder llevársela de inmediato. Bueno. Hay que ver como hacer para no ofenderle.
Conviene pagarle bien. De cuando en cuando llevarle un regalito. Hacerle alguna atención demuestra que somos seres humanos. No se visita al granjero, de la misma manera que se visita el Super. Caramba.